El ‘No’ sera escuchado en La Habana pero no se sentará a la mesa

La Mesa de La Habana desbloquea parte del Acuerdo de Paz. Un comunicado conjunto de las FARC y el Gobierno mantiene las garantías del alto al fuego y pide a la ONU que prorrogue el monitoreo en Colombia.

Las delegaciones del Gobierno Nacional y las FARC-EP en La Habana han emitido hoy su primer comunicado conjunto desde que se conociera el ‘No’ del plebiscito al Acuerdo de Paz. Una nota que vuelve a insistir en la voluntad de seguir con el proceso de paz de ambas partes y que lanza tres mensajes principales: Primero, se escuchará la voz del ‘no’, pero la negociación seguirá siendo únicamente entre Gobierno y guerrilla, es decir el uribismo no se sentará a esa mesa de negociación. Segundo, el alto el fuego bilateral se mantiene, se ha definido un nuevo protocolo dirigido a garantizar la seguridad en las zonas de reagrupamiento y se pide a Naciones Unidas que prorrogue su tarea de monitoreo en el terreno.

Y como muestra de confianza en el proceso la mesa de La Habana y de que la Paz no tiene marcha atrás, desbloquea parte de las cuestiones incluidas en el Acuerdo: los referentes al desminado, la sustitución de cultivos ilícitos, los menores reclutados, presos y desaparecidos.

La nota hecha pública hoy, a las pocas horas de conocerse el Premio Nobel de la Paz al presidente Juan Manuel Santos, se ha redactado depués de una reunión en la que también han estado presentes los países garantes y el Jefe de la Misión Especial de las Naciones Unidas en Colombia, Jean Arnault.

A pesar de esta situación de impasse que parece imprimir el ‘No’ y el nuevo marco de diálogo abierto no implica la paralización del proceso. Los equipos negociadores se comprometen a continuar avanzando “en la puesta en marcha de medidas de construcción de confianza de carácter humanitario, tales como, la búsqueda de personas dadas por desaparecidas, los planes pilotos de desminado humanitario, la sustitución voluntaria de cultivos de uso ilícito, los compromisos respecto a la salida de menores de los campamentos y sobre la situación de personas privadas de la libertad”

El comunicado conjunto reitera el compromiso de las partes con el Acuerdo Final que salió de cuatro años de “intensas negociaciones” y valida la necesidad de las “reformas y medidas” que contiene para sentar las bases de la paz y garantizar el fin del conflicto armado. No obstante reconocen el pronunciamiento mayoritario en favor del ‘No’, “así fuera por estrecho margen”, y admiten que en el marco de las facultades presidenciales que otorga la Constitución “es conveniente que sigamos escuchando, en un proceso rápido y eficaz, a los diferentes sectores de la sociedad, para entender sus preocupaciones y definir prontamente una salida por los caminos señalados en la sentencia de la Corte Constitucional”.

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“Las propuestas de ajustes y precisiones que resulten de ese proceso, serán discutidos entre el Gobierno Nacional y las FARC-EP para dar garantías a todos”. No habrá terceros sentados a esa mesa.
En este sentido, Humberto de la Calle habla de “un país dividido” y asegura que “si se quiere construir la paz de verdad, tenemos que buscar el consenso más amplio posible, tenemos que buscar la unión”.

Cese al fuego y monitoreo de Naciones Unidas

Sobre el Cese al Fuego y de Hostilidades Bilateral y Definitivo decretado el pasado 29 de agosto, el comunicado conjunto “reitera” el compromiso del presidente de mantenerlo en vigor -fueron las primeras palabras de Santos el domingo tras el plebiscito- y a ello suman “las garantías de seguridad y protección de las comunidades en sus territorios”.

Para ello se ha acordado un protocolo, “dirigido a prevenir cualquier incidente, en zonas de pre-agrupamiento en los cuadrantes definidos y asegurar un clima de seguridad y tranquilidad” con la plena aplicación de todas las reglas que rigen el cese al fuego. Serán las Naciones Unidas las encargadas de monitorear y verificar el cumplimiento del protocolo y las reglas del alto el fuego. Y con este propósito solicitan al Secretario General de las Naciones Unidas que autorice una prórroga de la misión de la ONU para ejercer las funciones de monitoreo, verificación, resolución de diferencias, recomendaciones, reportes y coordinación del Mecanismo de Monitoreo y Verificación. Una invitación que extienden a los países que contribuyen a la Misión con observadores desarmados.

Nuevas reuniones

De la Calle ha anunciado que la próxima semana continuarán las reuniones con los diferentes sectores que participaron en las elecciones incluyendo también los que votaron por el ‘Sí’ para
“absolver dudas que, en su mayoría, obedecen a interpretaciones inexactas de lo acordado”.
“Cualquier ajuste o precisión que se le haga al Acuerdo Final deberá ser el resultado de un diálogo constructivo entre las delegaciones del Gobierno y las FARC”, han insistido el jefe negociador del Gobierno.