El ELN reconoce que asesinó al gobernador indígena del Alto Baudó

En un comunicado, el Frente de Guerra Omar Gómez, asume el asesinato de Aulio Isaramá Forastero, pide perdón a la comunidad aunque revictimiza al líder indígena y dice seguir comprometido con el alto el fuego.

Cinco días después del asesinato de Aulio Isaramá Forastero, y tal y como denunció la comunidad, se confirma que fueron guerrilleros del Ejército de Liberación Nacional (ELN) los que asesinaron al gobernador del resguardo de Catrú Dubasa-Ankozó, en el golpeado municipio de Alto Baudó (Chocó). El Frente de Guerra Omar Gómez, responsable de esta acción, ha publicado un comunicado en el que reconoce los hechos aunque revictimiza a la víctima al asegurar que Isaramá “tenía relación con la inteligencia militar, razón por la cual la unidad que operaba cerca a su comunidad, procede a detenerlo para investigarlo tal como pueden constatarlo los miembros de dicha comunidad”.

Según el Frente guerrillero, la culpa de lo sucedido tampoco es 100% responsabilidad de los armados, sino del gobernador indígena, que se negaba a caminar y que se abalanzó sobre un guerrillero “con el trágico desenlace conocido”. “En ningún momento se había impartido orden ni autorización para atentar contra la integridad física del señor gobernador Aulio Isaramá. La unidad guerrillera que lo detuvo solo tenía como propósito una investigación”.

El asesinato del gobernador de este resguardo se suma a la grave situación que viven las comunidades de Catrú Dabasa-Ankozó, donde los choques entre el ELN y grupos paramilitares mantienen a los embera dóbida de forma alterna en situación de confinamiento, sin poder cultivar y en crisis alimentaria, o en desplazamiento forzado.

“Lamentamos profundamente el hecho y pedimos perdón por este doloroso caso a sus familiares y allegados y comprendemos sus palabras de dolor por lo ocurrido; igual expresamos a la comunidad a la que pertenecía el gobernador y a todos los pueblos indígenas quienes nos merecen todo el respeto y reconocimiento, tal como lo conocen las comunidades del Chocó con quienes nos relacionamos. A todos ellos les reiteramos nuestra palabra para plantear la verdad frente a lo ocurrido, reconocer el error cometido y dar la cara para aclarar lo necesario”, expresa la dirección del Frente Omar Gómez en un comunicado que firman el viernes 27 de octubre, aunque no se ha divulgado hasta el domingo 29.

Ese sector del ELN opera en una de las zonas más complejas para la aplicación del cese al fuego bilateral y temporal que está vigente entre la guerrilla y el Estado ya que hay múltiples grupos paramilitares operando y el Frente Omar Gómez ha mantenido duros enfrentamientos en la zona en lucha de control territorial en los últimos meses. Sin embargo, a pesar de algunas dificultades iniciales, el cese al fuego se estaba manteniendo. El asesinato de Aulio Isaramá es el primer escollo grave del cese, aunque el ELN ha asumido la responsabilidad sin esperar a que el Mecanismo de Veeduría y Verificación (MV&V) esclareciera los hechos.

A pesar de lo ocurrido, el frente guerrillero dice estar comprometido con el cese al fuego –que aunque sólo es de hostilidades con el Ejército se firmó para procurar “alivio humanitario” a las comunidades-. También dicen los guerrilleros estar a la espera de que “en la Mesa de Quito se apruebe el escenario de interlocución directa de los sectores populares, sociales y gremios de la región con nuestro Frente de Guerra, para que mutuamente nos escuchemos, hagamos los aportes y aclaremos las inquietudes, contribuyendo así a una visión de Patria desde esta región del país y aportemos en la solución a los problemas”.