Los enfrentamientos con el ESMAD no frenan las marchas en Quibdó
El ESMAD y la Policía han irrumpido en el paro cívico que protagoniza el Chocó desde el pasado 10 de mayo y los enfrentamientos entre los agentes y los manifestantes se han hecho sentir durante las jornadas del marte y el miércoles. El procurador departamental, Richard Moreno, asegura que “hubo exceso de fuerza y apresuramiento por parte de la fuerza pública al sacar al ESMAD a las calles”. El saldo en estas dos jornadas es de “cinco heridos con arma contundente y cuatro retenciones por parte de la policía”, según informó Luis Murillo, defensor departamental del pueblo.
En la mañana de este miércoles, a las afueras del recinto donde se desarrollan las conversaciones entre el Comité de Paro Cívico y los representantes del Gobierno nacional, uniformados de la policía se enfrentaron a piedras con los manifestantes que realizaban arengas a las puertas del edificio. Allí se pudieron ver uniformados alentando a los manifestantes a enfrentarse a la fuerza pública.
“Era innecesaria la participación del ESMAD en las protestas”. Son las palabras de Richard Moreno al referirse al ingreso del Escuadrón Móvil Anti Disturbios -ESMAD- en las jornadas adelantadas en Quibdó. “La marcha seguía siendo pacífica y la presencia del ESMAD podría generar brotes de provocación como efectivamente sucedió”, se lamentó Moreno.
Según el procurador departamental, la razón por la cual el ESMAD ingresó a las manifestaciones fue “la quema de llantas”, pero esta acción, puntualizó, ya se había evaluado en un consejo de seguridad y se había acordado no reprimir dicha actividad a “menos que conllevase a un incendio, daños ambientales u otro delito, cosa que no se dio”.
Fue sobre las 11 de la mañana de este martes 16 de mayo cuando la tranquilidad de las protestas se vio interrumpida ante el anuncio de la retención de 4 jóvenes, incluido un menor de edad, por parte de la policía aduciendo quema de llantas. Rápidamente la entrada del comando de policía Chocó se vio copada por centenares de manifestantes exigiendo la liberación de sus compañeros. La respuesta de las autoridades a los reclamos se tradujo en la presencia del ESMAD.
Celia Villa, una de las manifestantes afectadas por el accionar del ESMAD, cuenta que “los policías estaban tirando gases lacrimógenos y disparado” cuando su instinto materno la llevo a proteger a su hija, una menor de edad que estaba siendo agredida por el personal policial. Narra Villa que su única acción fue abrazar a su hija mientras cerca de “15 policías” le daban “garrote” e intentaban lanzar gas lacrimógeno en su rostro.
Otro hecho se vivió al interior de la Clínica de Comfachoco, un centro de salud de primer nivel ubicado a pocos metros de la estación de Policía al cual ingresaron agentes con la intención de retener a Carmelo Palacios, joven manifestante quien habría recibido algunos golpes de la fuerza pública y quien ingresó al centro de salud para salvaguardar su integridad. “Yo no entiendo porque me agredían, en ningún momento lance algo o hice algo en contra de ellos”, manifiesta Palacios. La rápida acción de otros manifestantes impidió la detección de este joven.
A lo largo de las jornadas de protesta se han hecho públicos videos de agentes de policía intentando impedir el ingreso de funcionarios de la Defensoría del Pueblo a las instalaciones de la Policía, situaciones que serán investigadas, explicó Luis Murillo, “para determinar las responsabilidades y la gravedad de los hechos”.
El comandante de Policía, el coronel Jhon Milton Arévalo, indicó que el ESMAD “está capacitado plenamente para intervenir cualquier situación con los medios y la fuerza que nos da el estado para atender de manera favorable estas situaciones”. Sin embargo, el procurador departamental dice tener en su poder videos e imágenes de soporte para dar inicio a las investigaciones sobre los hechos de los últimos días en el Chocó y establecer responsabilidades por parte de los miembros de la fuerza pública.
Sin acuerdos
Paralelo a las manifestaciones en las calles de Quibdó, se adelantan las conversaciones entre miembros del Comité por la Dignidad y la Salvación del Chocó y miembros del gobierno nacional encabezados por el Ministro de Medio Ambiente, Luis Gilberto Murillo, y está prevista la llegada del secretario general Presidencia, Luis Guillermo Vélez, para dar forma a los avances adelantados en las mesas de concertación. De momento se conoce el ofrecimiento del gobierno de 339.000 de los 720.000 millones de pesos que se requieren para terminar las vías Quibdó Medellín y Quibdó Pereira, ofrecimiento rechazado en primera instancia por los convocantes del paro cívico, porque «no nos sirve» y no responde a lo prometido el año pasado. La reunión de este miércoles se prolongó durante diez horas, según explicó Antonio Andrade, del Comité Cívico y por la Dignidad del Chocó, quien insistió en que no se está renegociando nada nuevo, sino los incumplimientos de lo acordado tras el paro cívico de 2016. «No se levanta porque no nos están cumpliendo, y el Gobierno nacional sigue irrespetándonos y afrentando nuestra dignidad en la medida que no muestra interés por solucionar las necesidades básicas». «Dan largas y no se concretan acciones que garanticen el derecho al acceso a la saludo» y Bajirá «sigue en las mismas. Es una bofetada que el Ejecutivo se mantengan en dilatar la publicación del mapa» y así repasó el resto de temas como la educación y las tarifas energéticas. Según el Comité el Gobierno se enreda en explicaciones sin dar respuestas concretas