Los medios ignoran el proceso de paz con el ELN
La Gestoría de Paz de la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) está segura de que “las Audiencias Preparatorias representan el escenario en la historia donde más se ha avanzado en un proceso de solución política con el gobierno colombiano”. La trascendencia que le da el ELN a estos encuentros con la sociedad civil para estudiar el modelo para que esta participe e incida en la mesa de negociación de Quito no parece ser compartida por los medios de comunicación en Colombia. De hecho, la Gestoría, conformada por Juan Carlos Cuéllar y Eduardo Martínez, se lamenta de que “las dos semanas que duraron estos espacios, estuvieron copados mediáticamente por algunas tormentas ligadas a los escándalos de corrupción, donde quedaron nuevamente en evidencia las actuaciones tramposas de un sector importante de la clase política, y por la amplia difusión mediática de la agónica dinámica de implementación de los acuerdos de paz, esta vez por cuenta de los recortes que le hizo el congreso a varios componentes del acuerdo al que habían llegado las FARC-EP con el gobierno colombiano”.
Las audiencias han tenido lugar entre el 31 de octubre y el 16 de noviembre y, ahora, Gobierno y ELN tienen hasta el 15 de diciembre para trabajar de forma conjunta en el diseño de una propuesta que establezca las condiciones de la participación de la sociedad civil en la Mesa de Quito.
Según lo transmitido por el ELN, las delegaciones, de muy diversos orígenes e intereses, sí coinciden en algunos aspectos. El que será más conflictivo es el de la petición de que “la participación de la sociedad no debe ser consultiva, sino que debe tener un papel determinante para la toma de decisiones”. Este punto no va a ser del agrado del Gobierno aunque sí refuerza la posición del ELN que ha insistido desde el principio de este proceso de negociación en que la guerrilla no puede usurpar la voz de las comunidades y de los colectivos.
Será importante saber si la propuesta que salga de Quito contempla otra de las peticiones de la mayoría de los 211 delegados y delegadas que han participado en las 8 audiencias presenciales y las 2 virtuales que se han celebrado: que la participación sea en los territorios. Este punto, además de las dificultades logísticas que pueda suponer, está amarrado a otra de las peticiones coincidentes: la desescalada del conflicto y las garantías de seguridad. Algo que no ocurrirá si, además, las partes no cumplen los acuerdos. Y en esa línea, muchos de los delegados, hicieron “un reclamo muy fuerte al ELN por los hechos ocurridos en Chocó en el cual fue responsable del asesinato de un gobernador indígena”, pero “también se hizo un duro llamado al Estado colombiano por su respuesta insuficiente a la situación sistemática de asesinato a los y las líderes sociales”, según informa la Gestoría.
Ahora, en el cuarto ciclo de la negociación entre Gobierno y guerrilla en Quito –que comenzó el 24 de octubre y se extiende hasta el 15 de diciembre- se está estudiando la posibilidad de extender el cese al fuego bilateral y temporal que está vigente hasta el 9 de enero de 2018. “Si la participación ha de darse en los territorios, es fundamental que como parte de las garantías y las plenas condiciones para que la población pueda asistir a estos espacios, se paren y se eviten escenarios de disputa y confrontación militar entre las partes”, insiste la Gestoría de Paz. Mientras las delegaciones siguen negociando en Quito se producen otros encuentros clave para lograr un “alivio humanitario” en los territorios. De especial relevancia ha sido la participación de tres representantes de los pueblos indígenas del Chocó que esta semana se reunieron con ambas delegaciones después de la grave situación generada en el territorio de Alto Baudó tras el asesinato de un gobernador indígena por el Frente Occidental de Guerra.
Las Audiencias Preparatorias no han contado con todos los participantes esperados y la razón vuelve a tener que ver con la infinita campaña electoral que ya comenzó en el país. Ni partidos políticos ni militares han intervenido en estas audiencias ya que para el Gobierno el momento político lo desaconsejaba.